SAQUITO DE SEMILLAS

SAQUITO DE SEMILLAS

Como dice el refrán “nunca es tarde si la dicha es buena" He tardado mucho tiempo en descubrir los saquitos de semillas, algo tan práctico que consideramos que nos nos puede faltar en casa. Ocupan poco espacio, se adaptan a cualquier parte de tu cuerpo, naturales usados a modo de analgésico y antiinflamatorio, el calor seco dilata los vasos sanguíneos y facilita la circulación.

En concreto utilizo “El saquito de la Salud" especialmente recomendado para aliviar los cólicos de los bebés. Pero en casa no tenemos bebés 😆, esta medida de 25 cm x 12cm  es muy practica. Lo utilizamos para las pequeñas contracturas, dolores musculares y cervicales, con más motivo ahora que empieza el frío y tendemos a ir encogidos.

Personalmente me gusta colocarlo en mis manos, proporciona un calor seco y penetrante que alivia y relaja el dolor de la artrosis. Además el agradable suave aroma que desprende a lavanda es otra factor que contribuye a relajarte más aún. Mi mejor momento  de aplicarlo es a la hora de ir a dormir, si me quedo dormida con el saquito no molesta. El relleno de semillas de mijo, con un tamaño pequeño  y circular, proporcionando un tacto confortable que se adapta a tu cuerpo a la perfección.

A las niñas la combinación de calor y aroma, cuando tienen alguna pequeña dolencia, las relaja haciéndolas sentir mejor. Mi hija mayor se queja de dolor en las rodillas, está creciendo, colocarle el saquito la tranquiliza y el dolor mejora o desaparece, simplemente la sensación de un calor y aroma agradable, le provoca un bienestar que  le hace olvidar ese malestar.

¿Cómo utilizarlos?

Calienta el saquito térmico en el microondas a potencia máxima, para aliviar las lesiones musculares uno 120 segundos sería suficiente, dependiendo de la potencia del microondas hará falta más o menos tiempo. Prueba a calentar a intervalos de 1 minuto, removiendo el interior del saquito térmico hasta conseguir la temperatura deseada y aplicar en la zona de dolor.

Un pequeño truco que nos dá “El saquito de la Salud" para saber si el saquito se ha calentado lo suficiente es colocar un vaso de agua lleno por la mitad junto al plato y el saquito. Cuando el agua hierve es síntoma de que el calor es suficiente.

Aplicación en calor

Para ayudar a los bebés a aliviar los cólicos del lactante. La sensación de calor en el abdomen relaja, la sangre fluye mejor, libera gases e hinchazón. Cuando lo utilizas con tu bebé recomiendan comprobar que no lo has calentado demasiado y no aplicarlo directamente sobre su delicada piel para evitar quemaduras.

Combaten el frío y alivian los efectos adversos de artritis, dolores de espalda, bursitis, cólicos, dolor de oídos, tendinitis, sinusitis, tensión en el cuello, dolor cervical, desgaros, esguinces, dolor menstrual, contracturas, dolores musculares, lumbalgia, etc.

Aplicación en frío

Sí también en frío. Tendrías que introducir el saquito térmico en el congelador dentro de una bolsa de plástico o “tupper", que quede herméticamente cerrado evitando que se moje, al menos durante una hora. El saco térmico tiene la propiedad de amoldarse fácilmente a tu cuerpo, sin que se congele, las semillas de mijo seguirán estando sueltas pero frías.

Con el frío se controla  el flujo sanguíneo y se rebaja  la inflamación y el dolor. Para episodios de migraña o dolor de cabeza puede ayudar aplicado sobre frente y ojos. Aunque para el dolor de cabeza el saquito puede ir bien también en caliente aplicándolo en la nuca, la sangre fluirá mejor hacia el cerebro, oxigenándolo y ayudando rebajar o eliminar el dolor de cabeza.

¿Cómo cuidarlos?

Si los usamos correctamente y los cuidamos  nos pueden durar varios años. Hay que lavarlos en seco, no se debe sumergir, con un producto de lavado en seco se humedece y frotando con un paño limpio poco a poco. Si en verano no lo utilizas tanto, una opción puede ser guardarlo en el congelador bien aislado, bolsa plástico o “tupper", así te durará más.